Riqueza humana

Hola de nuevo, si ya leyeron mi blog pasado les va a parecer un poco irónico el título de este ya que fácilmente comprobamos en ese blog que la felicidad no radica en el tener o en la riqueza. Pero por eso en el título la palabra riqueza va acompañada de la palabra "humana" y no de la palabra "material". Al darnos cuenta de que la felicidad no esta en lo material y en el tener nos habíamos quedado reflexionando acerca de en donde verdaderamente radica la felicidad y les dejé una pista con la imagen del final. Para quienes no la conocen, la señora de la foto es la Santa Madre Teresa de Calcuta, una monja católica que fundó la congregación de las Misioneras de la Caridad en Calcuta en 1950 y que durante más de 45 años atendió a pobres, enfermos, huérfanos y moribundos. Definitivamente la Madre Teresa no puso en el pedestal de su vida los bienes materiales o la riqueza, ella llevó una vida desinteresada y llena de virtudes heroicas que como se puede ver en la sonrisa de la foto la llenaron de satisfacción pero sobre todo de riqueza humana. Y así como ella hay muchas personas en el mundo que nos ayudan a dar respuesta a nuestra pregunta. 

Francisco Ugarte de una forma muy acertada nos dice que la felicidad consiste en dilatar el propio ser, pero no se queda en esa riqueza humana sino que va más allá y nos revela el medio para adquirirla, los valores. En este sentido los valores constituyen el contenido y el camino para ser feliz. Y aunque para algunos de nosotros esto nos haga completo sentido, aun hay quienes todavía no lo comprenden del todo porque la realidad es que lo que la gente busca no es verdadera felicidad sino momentos placenteros. Pero como en el blog pasado creo que muy fácilmente podemos reconocer esta idea que nos plantea Francisco Ugarte en la realidad. Esto es así porque si lo piensas un valor es todo aquello que enriquece al hombre, que lo hace ser más. De esta forma actuar en base a un valor le da contenido a nuestra existencia porque pasamos de lo que somos a lo que estamos llamados a ser. A esto se le conoce como perfeccionamiento, cuando actualizamos nuestras potencialidades humanas, desarrollamos capacidades, crecemos y como ya he dicho encarnamos valores. 

Como me gusta dejarlos con algo para reflexionar quería hacerlo con lo que escribí acerca de pasar de lo que somos a lo que estamos llamados a ser ya que para la mayoría de personas es difícil darle una respuesta a los interrogantes fundamentales que nos plantea la existencia como ¿a dónde voy? ¿qué quiero? ¿cuál es el sentido de la vida? Piénsenlo y nos vemos la próxima semana!